lunes, 31 de marzo de 2008

Henning Mankell - Profundidades


Amaba profundamente a su esposa. Cada vez que debía partir de viaje por cuestiones de trabajo y se despedía de ella, inspiraba sin que se notase, el perfume de su piel cuando la besaba brevemente. Era como si almacenara aquel aroma, como si de un buen vino o de una especie de opio se tratase, para recurrir a él cuando se sintiese tan abandonado que corriese el riesgo de perder el control sobre sí mismo.


Allá por kastellholmen, un remolcador despedía vaharadas de vapor. Posó su mirada en una gaviota suspendida en el aire, sobre el buque.


Él era un hombre solitario. Su soledad se parecía a un abismo en el que temía precipitarse un día. Había calculado que ese abismo debía tener un mínimo de cuarenta metros y que debía arrojarse a él de cabeza, para asegurarse la muerte.


Se encontraba exactamente en el centro de la escala. Estimó, aproximadamente, que la escala cubría un desnivel de siete metros. Ahora se encontraba, por tanto, a tres metros y medio del muelle a igual distancia de la borda de la embarcación.


Todos sus recuerdos estaban relacionados con las distancias. Distancias entre él y su madre y su padre, entre el suelo y el techo, entre desasosiego y gozo. Toda su vida giraba en torno a las distancias, a cómo medirlas, reducirlas o extenderlas. Era un hombre solitario en una búsqueda constante de nuevas distancias que determinar o interpretar.


Medir la distancia era una suerte de conjuro, su instrumento para domeñar los movimientos del tiempo y del espacio.


Desde el principio, desde que él tenía capacidad para recordar, la soledad había sido como su propia piel.

kristina Tacker no era sólo su esposa. También era la tapadera invisible que él ponía sobre aquel abismo. (págs. 15-16)


****


En la borda de estribor, donde se hallaba medio oculto bajo la escala, entrevió la costa a la luz del alba. Islas y arrecifes surgían y desaparecían sumidos en la irregular superficie del mar.


''Aqui comienza y termina un país'', se dijo Lars Tobiasson-Svartman. ''Pero la línea limítrofe es escurridiza, no existe un punto en el que termine el mar y comience la tierra, Los islotes apenas se ven sobre la superficie del mar, Antiguamente, los hombres de mar veían en estos peñascos, bajíos y arrecifes, monstruos marinos horrendos y extraordinarios, Yo también puedo imaginarme esas rocas como animales que emergen despaciosos del mar. Pero no me infunden ningún temor. Esas rocas que se entrevén entre las olas se me antojan hipopótamos reflexivos e inocentes, de una especie que sólo se encontrará en el Báltico.


''Aqui empieza y termina un país'', reiteró para sí, ''un macizo que endereza calmoso su espalda. Un macizo llamado Suecia.''


Se acercó a la borda y miró el agua, de un azul grisáceo, que se estrellaba contra los flancos del destructor. ''El mar nunca cede'', sentenció para sí, ''nunca vende su pellejo. En invierno este mar es como una piel helada. El otoño es calma, espera. Repentinos arrebatos de vientos vociferantes. El verano no es más que un raudo destello en la límpida superficie del agua."


''El mar, la elevación del terreno, todos esos fenómenos, incomprensibles, son como el lento movimiento desde la niñez hacia la senectud y la muerte. En todos los hombres se produce una elevación del terreno. Del mar proceden nuestros recuerdos.''


El mar es un sueño que nunca vende su pellejo. (págs. 23-24)


sábado, 29 de marzo de 2008

Pasaba por aqui



De un tiempo a esta parte, y siempre que le viene en gana, se presenta en casa el minino en cuestión.
Apareció un buen día, hace ya más de un año, y tras observarme en la distancia, con cierto detenimiento y mucho recelo, se fue.
En otra ocasión se dejó ver y su mirada, aunque no más intensa, sí fue doble. Me examinó antes de cruzar la terraza y antes de perderse escaleras arriba.
Así fue apareciendo, cada vez con mayor frecuencia y una -ténue- menor indiferencia. Le empecé a llamar, psssssss-psssssssssssss, minino-minino, pero que si quieres arroz Catalina: ni caso.
Llegó el momento en que, ante mi sorpresa, repondió a la llamada y se acercó. Pasó entre mis piernas, enroscó la cola y al ir a acariciarle se esfumó. Mminino-minino, pssssss-pssssss, pero nada.
Ese tipo de encuentros se sucedieron, hasta que aumentó el número de "enroscamientos" y "tocamientos". Muchas veces, al llegar a casa, le veía en la terraza, en la solana, dormilando. No había temor.
El platillo con leche no tardó en llegar, pero sinceramente, apenas lo probaba. Repetí la estrategia pero con escaso éxito. He de decir, que siempre le he visto lustroso, bien alimentado. Desconozco si tiene dueño, yo diría que no.
El día de la foto, me pilló con una lata de atún abierta en la nevera y pensé en seducirle un poco mejor. Comió sin mucho interés. Estuvo apenas dos o tres minutos, a cinco no llegó y como siempre, se esfumó. El tratamiento a cuerpo de rey apenas le inmutó.

martes, 25 de marzo de 2008

FOCUS: Ennio Morricone & Dulce Pontes


Salí de paseo en busca de un libro y la tarde generosa me lo regaló además unas frutas de mazapán y un cd. Husmeando en una tienda de música, picoteando como el mirlo lo hace por las mañanas en el parabrisas de mi coche (a saber qué encontrará), dí con este compact de Ennio Morricone y Dulce Pontes: "Focus". De él bueno, qué decir de él, es uno de mis compositores de bandas sonoras favorito. De ella, conocía unos cuantos fados, pocos, pero recordaba la fuerza de su voz. Me animé y lo compré. Me sentía generosa "conmigomisma" y eso, de vez en cuando, va bien. Me faltó tiempo para escucharlo una vez que llegué a casa y me gustó, me gustó mucho. Sólo hay un par de temas, de los quince que contiene, que no me han entusiasmado, pero los demás son a cada cual mejor.

La canción que destaco hoy "Nosso Mar" pertenece a la banda sonora de la película "Metti una sera a cena" que aqui en España se tituló "Supongamos que una noche cenando". Se trata de una película de 1969 cuya bso corrió a cargo de Ennio Morricone, y es que el hombre lleva muchos films a sus espaldas. Sinceramente la película no la he visto -intentaré remediarlo-; he conocido el tema NOSSO MAR gracias a este cd.
Focus incluye canciones de las películas: Cinema Paradiso, La Mission, Sacco E Vanzetti, Luz Prodigiosa (con letra de García Lorca), una versión de un tema de Chi Mai (House Of No Regrets) y otros muchos. Me falta aclarar que aunque yo me hice ayer con él salió al mercado en 2003.
Nosso Mar
Dulce Pontes
Composição: E. Morricone / Carlos Vargas & Dulce Pontes

Quando você vem,
Volta não volta,
Se revolta e se revolve louca,
Quando você vem,
Quando você se solta;
Quando você passa por mim
Vai mostrando a sua raça
E logo desperta
Um desejo de cantar jobim.

Quando você sai
Me cresce água na boca,
Vai não vai, seu coração me toca fundo
Faz cantar meu violão;
Quando enfim você descansa
E me convida a entrar na dança
Que vai dar no final
Num imenso carnaval!

Deixa eu te dar
O amor de menina,
Deixa eu sonhar
Você me alucina!
Vem me ajudar
A sambar direito,
Deixa eu rodar
E abra meu peito!

Quando você dá balanço
Nesse samba você me chama,
Quando você me ama
O seu corpo se derrama...
Você soma e segue
Nessa dança, no batuque,
No calor do tamborim,
Todo esse amor
Não vai caber em mim não!
Quando você for embora
Vida fora leve uma lembrança
Pois o amor é eterno
Enquanto durar...
Sempre que você escutar
O som do nosso bombo popular
Você vai recordar
O nosso amor, o nosso mar!

Vem meu brasil
Você me fascina
Deixa eu cantar
P´ra elis regina!
Vem me ajudar
A sambar direito,
Deixa eu rodar
E abra meu peito!

El cuento inconcluso de Alí y las babuchas

Alí se sintió atraído por el color de la montaña. Se veía cierta oquedad del tamaño de una persona y sintió la perentoria necesidad de palpar alrededor en busca de no sabía muy bien qué. Buscó en la parte derecha, donde la mano de un hombre adulto buscaría un interruptor. No tardaron sus dedos inquietos en encontrar un mecanismo metamorfoseado en la roca a modo de teclas de piano. Situó el índice, corazón y anular, y empezó a probar combinaciones. Con el índice y el anular presionando simultaneamente dió con la clave: la firme pared empezó a deslizarse.

El ruido que había provocado era, en la quietud del bosque, atronador, así que tras esperar un buen rato y comprobar que seguía solo, se adentró en las fauces pétreas de la montaña.

Se notaba cierto olor a champiñon y uno goteo pausado se multiplicaba en el interior. Más allá de la luz que llegaba desde la entrada no se veía nada así pues tuvo que esperar a que sus ojos se acostumbraran a la oscuridad. Pasados unos minutos se animó a proseguir mientras tanteaba las húmedas paredes del angosto pasillo. Desembocó en una amplia bóveda provista de la luz natural que se filtraba por una obertura.

Todo se veía vacío y la excitación que le había embargado minutos antes desapareció. No había nada. Y si no había nada,¿ por qué tanta seguridad? ¿ a cuento de qué venía el código rocoso en el acceso?

viernes, 21 de marzo de 2008

María Victoria Atencia

SAZÓN

Ya está todo en sazón. Me siento hecha,
me conozco mujer y clavo al suelo
profunda la raíz, y tiendo en vuelo
la rama, cierta en ti, de su cosecha.

¡Cómo crece la rama y qué derecha!
Todo es hoy en mi tronco un solo anhelo
de vivir y vivir: tender al cielo,
erguida en vertical,como la flecha

que se lanza a la nube. Tan erguida
que tu voz se ha aprendido la destreza
de abrirla sonriente y florecida.

Me remueve tu voz. Por ella siento
que la rama combada se endereza
y el fruto de mi voz se crece al viento

***

TERNURA

Quizás no sea ternura la palabra precisa
para este cierto modo compartido
de quedar en silencio ante lo bello exacto,
o de hablar yo muy poco y ser tú la belleza
misma, su emblema, aunque tan próxima y latiendo.
Y es también un destino unánime que vuelvan
a idéntico silencio -cuando llegue la hora
de la tregua indecible- mi palabra y tu zarpa.

Y para mis hijos: tengo papel amarillo


Cuantas veces no habré leido expresiones como "la biblioteca de mi abuelo", "la biblioteca de mi padre"....
Desde mis mas tiernos recuerdos, los libros han sido protagonistas de mi vida.
Recuerdo aquella vez en que robé una biblia, con cinco años, atraída por la suavidad de la piel y los bordes dorados.¡Qué papel tan fino! La posterior regañina que mi madre me dió y, como faltó tiempo para que, juntas las dos, la devolvieramos -con gran dolor de mi corazón-. Puesto que aquel libro era precioso no sentí ninguna vergüenza, y sí mucha tristeza, ya que había sido yo quien lo había rescatado de su abandono en el hall del colegio, en una silla cualquiera...
Sí, ese es uno de los primeros recuerdos de mi infancia: protagonizado por mi amor a los libros. Desde entonces leer uno y, a ser posible, tenerlo, ha sido uno de mis mayores placeres y privilegios. Hoy en día mi biblioteca ronda los casi dos mil volumenes y siento una gran satisfacción cuando la toco, la huelo y la miro. No hay sensación de poder equiparable a buscar un libro en tu biblioteca y no encontrarlo: ¡tienes tanto dónde mirar y están tan desordenados...!¡je!
Hoy buscando alguna novela de Arthur C. Clarke para releer -como pequeño homenaje particular- me tropecé con un libro idolatrado en mi juventud: "La Puerta de las Siete Cerraduras" de Edgar Wallace. Curiosamente lo mencionaba hace unas semanas en un foro de literatura,y hoy voy, y me tropiezo con él. ¡Había olvidado que lo tenía! ¡Qué Placer!
En su día lo saqué de una biblioteca privada-pública a la qué solía ir de bambina. Pertenecía a "La Caixa" y estaba ubicada en una de las arterias de "Ciutat". Las tardes que habré pasado allí, siempre sola, siempre con libros. Años después debí de tropezarme con este libro: veo que pone el año en que lo conseguí, 1985, se editó en 1984 así que deduzco que lo debí comprar con la alegría de poseer la novela que tanta satisfacción me dió en su momento.
Lo abro y veo las hojas amarillentas y manchadas, y me digo que aún se puede leer... pero no dejo de preguntarme que aspecto tendrán dentro de otros 23 años más. No dejo de preguntarme qué heredaran mis hijos. ¿Será algo más que triste papel amarillo? Sí, creo que sí.

jueves, 20 de marzo de 2008

Arthur C. Clarke (1917-2007)

Sir Arthur Charles Clarke murió ayer, 19 de Marzo, en la ciudad de Colombo, Sri lanka. Con él se fue uno de los grandes maestros de la ciencia ficción.Tenía 90 años.

Escritor y científico ya de pequeño mostró su fascinación por la astronomía. Con un telescopio casero no se conformó con mirar al cielo sino que dibujó un mapa de la Luna. Al terminar los estudios secundarios se trasladó a Londres,1936, y al estallar la Segunda Guerra Mundial sirvió en la Royal Air Force como especialista en radares, involucrándose en el desarrollo de un sistema de defensa por radar.

Concluida la guerra, publica su artículo técnico Extra-terrestrial Relays, en el cual sienta las bases de los satélites artificiales en órbita geoestacionaria (llamada, en su honor, órbita Clarke), una de sus grandes contribuciones a la ciencia del siglo XX. Este trabajo le valdrá numerosos premios, becas y reconocimientos. En ese período estudia matemáticas y física en el King's College, estudios que finalizaría con honores.

También son conocidas sus famosas leyes de Clarke, publicadas en su libro de divulgación científica Perfiles del Futuro (1962). La más popular (y citada) de ellas es la llamada "Tercera Ley de Clarke": Toda tecnología lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia.

Desde 1956 y hasta su fallecimiento vivió en la isla de Sri Lanka en parte por su interés por la fotografía y la exploración submarina, en parte por su fascinación por la cultura india. Decía que bucear era lo más cercano a la sensación de ingravidez que se puede experimentar en el espacio.

A él le debo en gran medida mi entusiasmo por la ciencia ficción. Aunque su obra, por comparación, no es muy prolífica si es fundamental. Su influencia, como apunté no hace mucho, trasciende la literatura, alcanzando de manera muy directa el mundo del cine, pues son muchas las obras que han brillado con luz propia en el séptimo arte.

Obra
Novelas:

Odisea espacial
* 2001: A Space Odyssey2001: Una odisea espacial
* 2010: Odisea dos
* 2061: Odisea tres
* 3001: Odisea final

Cita con Rama'
* Cita con Rama
* Rama II (novela)Rama II (con Gentry Lee)
* Rama revelada (con Gentry Lee)
* El jardín de Rama (con Gentry Lee)

Otras novelas:

* Preludio al espacio
* Las arenas de Marte
* Islas en el cielo
* El fin de la infancia
* Claro de Tierra
* La ciudad y las estrellas
* En las profundidades
* Naufragio en el mar selenita
* Regreso a Titán
* Fuentes del paraíso
* Cánticos de la lejana tierra
* Venus Prime
* Tras la caída de la noche (con Gregory Benford)
* El espectro del Titanic
* El mundo es uno
* El martillo de Dios
* Luz de otros días (con Stephen Baxter)
* El ojo del tiempo (con Stephen Baxter)

Colecciones de relatos :

* Expedición a la Tierra (incluye ''El Centinela'')
* Alcanza el mañana
* Cuentos de la taberna del Ciervo Blanco
* Relatos de diez mundos
* El viento del Sol: relatos de la era espacial
* Cánticos de la lejana Tierra

Divulgación:

* El mundo es uno (Sobre la historia de las telecomunicaciones).

http://es.wikipedia.org/wiki/Arthur_C._Clarke

http://www.milenio.com/index.php/2008/03/20/211890/

O Que Será - Chico Buarque & Millton Nascimiento

Pieter Brueghel, El Viejo - Torre de Babel

-1563, Óleo sobre tabla de roble, Pintura Flamenca -

miércoles, 19 de marzo de 2008

Viento del Norte, Viento del Sur

De unos años a esta parte el ayuntamiento ,que anda sobrado de dinero, se autopromociona con una revista mensual, a todo color, que reparte gratuitamente entre sus conciudadanos. La finalidad es airear las inaguraciones del consistorio y fotografiarse el alcalde y allegados el mayor número de veces posible, por si no te has enterado de qué cara tienen nuestras mayores cabezas visibles.

Bueno, finalidades políticas aparte, se publican siempre en las últimas páginas unas fotos de los recién venidos al mundo en el municipio (no deben venir muchos, porque apenas aparecen, o tal vez, quizás, haya un criterio selectivo, como principal principio darwiniano, que desconozco) y de los enlaces matrimoniales civiles que tienen lugar en tan excelso lugar.

Ciñéndome a estos últimos, normalmente los novios, bien apuestos y muchas veces mixtos -en cuanto a nacionalidad se refiere-, van vestidos como la ocasión lo requiere. Al fín y a la postre suele ser uno de los días más significativos entre las gentes de bien que pasan por tal ritual. Ellas como auténticas protagonistas de una peli romántica, en su escena culminante, y ellos bien lustrosos y elegantes -como no podía ser de otro modo-, dispuestos a disfrutar "for ever and ever" de un estofado de perdices digno de La Ceneretolla.

A lo que vamos, me llamó la atención una pareja en la que la novia iba "vestida de calle", es más, hasta llevaba unos pantalones negros de punto (de mercadillo) ceñidos, que dadas sus dimensiones, le sentaban fatal. Pensé en la pobre criatura: ¿no habría podido alguien asesorarla, con cariño, un poco para mejorar su aspecto?
No sé porqué me apené por ella. Su cara ni feliz ni desgraciada miraba al frente como quien dice ahora estoy aqui como podría estar en otra parte. Después de eso, me fijé en su flamante marido. Era de color, bastante más alto que ella y mucho mayor. Vestía un sencillo traje marrón, los zapatos no muy lustrosos. Ni feliz, ni desgraciado -en eso hacían buena pareja-.
Definitivamente algo no cuadraba en aquella foto. Me fijé más, y reconocí a la chica, al leer el nombre. Hice memoria: si tenía los dieciocho años, los tenía recién cumplidos. De familia muy humilde, recordaba de su niñez la falta de higiene y sus carencias intelectuales. Era muy tímida y callada y su aspecto físico no ayudaba precisamente a relacionarse con los demás. Y allí estaba, casada con un hombre que le doblaba la edad, sin ir vestida de boda, en el supuesto día más feliz de su vida.
La malvada que hay en mí pensó en un matrimonio de conveniencia, claro, por aquello de conseguir la nacionalidad a cambio de dinero ¿para los padres? La otra, pensó que leo demasiado y veo muchas películas. Pero lo cierto es que me quedó una gran desazón en el alma al pensar que la palabra AMOR no se veía en ningún rincón de aquella instantánea. Tal vez el futuro me demuestre lo equivocado de mi pensamiento. ¡Ojalá sea así!

martes, 18 de marzo de 2008

Eduardo Mendoza - Sin Noticias de Gurb



Día 9

0.01 (hora local) Aterrizaje efectuado sin dificultad. Propulsión convencional(ampliada). Velocidad de aterrizaje: 6:30 de la escala convencional (restringida). Velocidad en el momento del amaraje: 4 de la escala Bajo-U1 o 9 de la escala Molina-Clavo. Cubicaje: AZ-0.3.
Lugar de aterrizaje: 63Omega(IIBeta) 28476394783639473937492749.
Denominación local del aterrizaje: Sardanyola.

07.00 Cumpliendo órdenes (mías) Gurb se prepara para tomar contacto con las formas de vida (reales y potenciales) de la zona. Como viajamos bajo forma acorpórea (inteligencia pura-factor analítico 4800), dispongo que adopte cuerpo análogo al de los habitantes de la zona. Objetivo: no llamar la atención de la fauna autóctona (real y potencial). Consultado el Catálogo Astral Terrestre Indicativo de Formas Asimilables (CATIFA) elijo para Gurb la apariencia de ser humano denominado Marta Sánchez.

07.15 Gurb abandona la nave por la escotilla 4. Tiempo despejado con ligeros vientos de componente sur; temperatura, 15 grados centígrados; humedad relativa, 56%; estado de la mar, llana.

07.21 Primer contacto con habitante de la zona. Datos recibidos de Gurb: Tamaño del ente individualizado, 170 centímetros; perímetro craneal, 57 centímetros; número de ojos, 2; longitud del rabo, 0.00 centímetros (carece de él). El ente se comunica mediante un lenguaje de gran simplicidad estructural, pero de muy compleja sonorización, pues debe articularse mediante el uso de órganos internos. Conceptualización escasísima. Denominación del ente, Lluc Puig i Roig (probable recepción defectuosa o incompleta). Función Biológica del ente: profesor encargado de la cátedra (dedicación exclusiva) en la Universidad Autónoma de Bellaterra. Nivel de mansedumbre, bajo. Dispone de medio de transporte de gran simplicidad estructural, pero de muy complicado manejo denominado Ford Fiesta.
07.23 Gurb es invitado por el ente a subir a su medio de transporte. Pide instrucciones. Le ordeno que acepte el ofrecimiento. Objetivo fundamental: no llamar la atención de la fauna autóctona (real y potencial).
07.30 Sin noticias de Gurb.
08.00 Sin noticias de Gurb.
09.00 Sin noticias de Gurb.
12.30 Sin noticias de Gurb.
20.30 Sin noticias de Gurb.



Día 10

07.00 Decido salir en busca de Gurb.
Antes de salir oculto la nave para evitar reconocimiento e inspección de la misma por parte de la fauna autóctona. Consultado el Catálogo Astral, decido transformar la nave en cuerpo terrestre denominado vivienda unifamiliar adosada, calef. 3 dorm. 2 bñs. Terraza. Piscina comunit. 2 plzs pkng. Máximas facilidades.

07.30 Decido adoptar apariencia de ente humano individualizado. Consultado Catálogo, elijo Conde Duque de Olivares.

07.45 En lugar de abandonar la nave por la escotilla (ahora transformada en puerta de cuarterones de gran simplicidad estructural, pero de muy difícil manejo), opto por naturalizarme allí donde la concentración de entes individualizados es más densa, con objeto de no llamar la atención.

08.00 Me naturalizo en el lugar denominado Diagonal-Paseo de Gracia. Soy arrollado por autobús número 17 Barceloneta-Vall d'Hebron. Debo recuperar la cabeza, que ha salido rodando de resultas de la colisión. Operación dificultosa por la afluencia de vehículos.

08.01 Arrollado por un Opel Corsa.

08.02 Arrollado por una furgoneta de reparto.

08.03 Arrollado por un taxi.

08.04 Recupero la cabeza y la lavo en una fuente pública situada a pocos metros del lugar de la colisión. Aprovecho para analizar la composición del agua de la zona: hidrógeno, oxígeno y caca.

08.15 Debido a la alta densidad de entes individualizados, tal vez resulte algo difícil localizar a Gurb a simple vista, pero me resisto a establecer contacto sensorial, porque ignoro las consecuencias que ello podría tener para el equilibrio ecológico de la zona y, en consecuencia, para sus habitantes.
Los seres humanos son cosas de tamaño variable. Los más pequeños de entre ellos lo son tanto, que si otros seres humanos más altos no los llevaran en un cochecito, no tardarían en ser pisados (y tal vez perderían laa cabeza) por los de mayor estatura. Los más altos raramente sobrepasan los 200 centímetros de longitud. Un dato sorprendente es que cuando yacen estirados continúan midiendo exactamente lo mismo. [...] (págs. 5-8)

Violeta Parra - Gracias a la Vida




Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dió dos luceros que, cuando los abro,
perfecto distingo lo negro del blanco,
y en el cielo su fondo estrellado
y en las multitudes el hombre que yo amo.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído que, en todo su ancho,
graba noche y días grillos y canarios;
martillos, turbinas, ladrillos, chubascos,
y la voz tan tierna de mi bien amado.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el sonido del abecedario,
con él las palabras que pienso y declaro:
madre, amigo, hermano, y luz alumbrando
la ruta del alma del que estoy amando.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados;
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos, montañas y llanos,
y la casa tuya, tu calle y tu patio.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dió corazón que agita su marco
cuando miro el fruto del cerebro humano;
cuando miro el bueno tan lejos del malo,
cuando miro el fondo de tus ojos claros.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto.
Así yo distingo dicha de quebranto,
los dos materiales que forman mi canto,
y el canto de ustedes que es el mismo canto
y el canto de todos, que es mi propio canto.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

sábado, 15 de marzo de 2008

Distancia de Seguridad

Son las ocho y media de la mañana, estoy parada en el semáforo y hay, al menos, tres minutos de espera.
Veo el inquieto discurrir urbano. El ojo alterna entre el rojo metálico, el acero y el hormigón. Raudo detecta en el paso de cebra, paseando -más que cruzando-, a una mujer mayor. Va empinada en unos difíciles tacones y en un moño decimonónico; el maquillaje, aún a esta distancia, se le nota a rabiar. Sigo mirando -tal es su lentitud al cruzar- hombros atrás y talones al aire envueltos en unas finas medias negras que puntualizan su caminar. Contrasta el pie suelto y desnudo en la media con el abrigo de invierno que viste. Se adivina el contoneo de sus caderas y, asombrosamente al tiempo, mantiene inmóvil la espalda, ¿cómo lo hará?Miro de nuevo su cara: rondará los sesenta y cinco años, tal vez incluso más.
No bien la pierdo de vista por la esquina, aparece un hombre que curiosamente lleva su mismo andar. ¿Quién se permite a esa hora en una jornada laboral tan poca velocidad? Me llama la atención pues es el mismo rítmo de su predecesora. Algo parece indicar que guardan cierta distancia de seguridad.
Lleva puesto un tres cuartos de paño azul, de corte marinero, va algo informal. Rondará los cincuenta y la media sonrisa que alumbra su rostro, más de satisfacción que de alegría, hace que mi mente se desboque y rapidamente invente una truculenta historia con la que acaba de pasar. ¿Cuál? No es difícil de dilucidar.
La luz cambia a verde y al girar los vuelvo a encontrar. Uno cambió de acera, pero vogan en la misma dirección y a los mismos nudos. Tal vez posponiendo una despedida que sólo yo llegué a imaginar.

jueves, 13 de marzo de 2008

Federico García Lorca - La Monja Gitana

Silencio de cal y mirto.
Malvas en las hierbas finas.
La monja borda alhelíes
sobre una tela pajiza.
Vuelan en la araña gris
siete pájaros del prisma.
La iglesia gruñe a lo lejos
como un oso panza arriba.
¡Qué bien borda! ¡Con qué gracia!
Sobre la tela pajiza
ella quisiera bordar
flores de su fantasía.
¡Qué girasol! ¡Qué magnolia
de lentejuelas y cintas!
¡Qué azafranes y qué lunas
en el mantel de la misa!
Cinco toronjas se endulzan
en la cercana cocina.
Las cinco llagas de Cristo
cortadas en Almería
Por los ojos de la monja
galopan dos caballistas.
Un rumor último y sordo
le despega la camisa,
y al mirar nubes y montes
en las yertas lejanías,
se quiebra su corazón
de azúcar y yerbaluisa.
¡Oh, qué llanura empinada
con veinte soles arriba!
¡Qué ríos puestos de pie
vislumbra su fantasía!
Pero sigue con sus flores,
mientras que de pie, en la brisa,
la luz juega el ajedrez
alto de la celosía.

Atardecer desde el Oratorio


lunes, 10 de marzo de 2008

Emily Brontë - Cumbres Borrascosas



...¡Muchacho, en qué poco te consideras! Ven, acércate al espejo y te enseñaré lo que debes desear. ¿Ves esas dos rayas entre tus ojos? ¿Y esas cejas espesas, que, en lugar de arquearse suavemente, se hunden en el centro? ¿Y esos dos diablos negros sepultados tan hondo que, en lugar de abrir sus ventanas de par en par, acechan centelleando por debajo como espías endemoniados? Procura aprender a suavizar esas torvas arrugas, a levantar los párpados con franqueza y a transformar los diablos en ángeles confiados e inocentes, libres de sospechas, de dudas, de recelos, viendo amigos en todas partes. No te acostumbres a ese aspecto de perro guardián con aire de saber que las patadas que recibe son merecidas y que sin embargo odia al mundo entero, igual que al que le pega, por lo que sufre.

domingo, 9 de marzo de 2008

Invierno: primer movimiento

La primera vez que ví el pueblo me pareció una postal. La carretera, que discurría por la falda de la montaña, alumbraba el pueblo tras una recta de dos kilómetros a nivel del mar. El día cálido de primavera avanzada resaltaba el azúl mediterráneo que ocupaba casi la totalidad del paisaje, y el blanco de la mayoría de las casas, plantas bajas, resplandecía contrastando con el verdor de la pequeña viña y los pinos. El silencio, rey de aquel entorno, actuaba de catalizador de los sentidos. Los poros respiraban sosiego y belleza.

Tras unas cuantas gestiones conseguí alquilar un pequeño apartamento en un edificio en primera línea de mar. No se alcanzaba a ver pero el rumor de las olas entraba en todos los rincones de aquel pequeño paraíso. Estaba en la segunda planta y gracias a un pequeño balcón, que daba a la calle, resultaba ser muy luminoso. Tenía casi un año por delante y la soledad iba a ser mi nueva amiga. Acababa de experimentar algo nuevo, compartir por primera vez un piso con tres chicas más, y ahora iba a pasar al extremo opuesto: vivir sola por primera (y única) vez . Son las vueltas de la vida.

Fueron pasando los meses y no tardé en encontrar mi rutina. Para acortar la semana, escapaba los miércoles por la tarde y regresaba al día siguiente a primera hora de la mañana. Muchas veces mi padre se venía conmigo para hacerme compañía. El viernes a mediodía, momento glorioso, regresabamos a la ciudad hasta que, con el lunes, el ciclo volvía a empezar. Fue entonces cuando fui consciente de la contaminación acústica que había en la ciudad.

Tenía en aquel tiempo un cachorro, un spaniel pequinés, que me habían regalado y que resultaba ser un peluche. No le eduqué muy bien así que la fregona y el cubo andaban siempre en danza. Bueno, supongo que nos alegramos un poco la vida. Un año después se escapó y por más que lo buscamos no hubo modo. Siempre he pensado que con su aspecto robó algún otro corazón.

Muchos fueron los viajes que hice aquel año y para amenizarlos no faltaba la música que cabalgaba conmigo. Había dos cintas que intercambiaba, una era de Carmina Burana y la otra Las Cuatro Estaciones. Según el estado de ánimo se iban alternando. Como llegada a cierta población la radio era una pura interferencia me acostumbré a pasar directamente de ella. De tanto oirlas las hice mías y, cómo no, había pasajes que siempre me conmovían. Uno de ellos era el Primer Movimiento del Invierno, imaginaba la destreza del violinista para ser fiel a las notas de Vivaldi y, sin darme cuenta, el pedal del acelerador se desbocaba al compás del Movimiento.

Muchos años después me encuentro con una interpretación, Nigel Kennedy, capaz de hacerme revivir aquella emoción. Oídla y veréis que no es para menos.


jueves, 6 de marzo de 2008

Juan Eslava Galán - La Mula

A un kilómetro, el grupo rodea los muros de piedra de la ermita de la Virgen de la Antigua, patrona de Hinojosa, que la guerra ha respetado, y toma la vereda de la derecha, que conduce al pozo del Arroyo. Allí hay ya un grupo de milicianos. El sargento nacional intercambia un breve saludo con el sargento republicano. Los que se conocen de visitas anteriores se saludan, se agrupan, sacan de los morrales la mercancía e inician el trapicheo. A los rojos les sobra el papel de fumar, dado que las fábricas de Alcoy caen en su zona, pero no tienen tabaco. Los nacionales, por el contrario, carecen de papel, pero tienen tabaco, porque las vegas de Granada y Canarias caen en su jurisdición. Antes que combatientes son fumadores.

Castro distingue a Manolico el de la Pirrañaca, bisojo, panzoncete, riendo como siempre, a pesar de los casi tres años de guerra.

_¿Qué pasa, Manuel? _lo saluda.

_¿Qué, dos paisanos no se abrazan? _ dice el miliciano abriendo los brazos.

Se abrazan.

_Me alegro de verte bien.

_Y yo a ti.

El de la Pirriñaca se enjuga una lágrima.

_Ahí tienes a un amigo que ha venido a verte. _ Señala el pozo con la barbilla_. ¿No te acuerdas del Churri?

_No me voy a acordar.

El Churri está sentado en el brocal. Alto, moreno, más delgado, quizá sea el mono azul que viste debajo de la chaqueta de cuero. Le sonríe sin dobleces a su antiguo amigo.

_Juanillo, ¿cómo te va?

Después de una vacilación, los dos se funden en un largo abrazo largo y silencioso. Castro no puede reprimir las lágrimas. Se las limpia con el dorso de la mano. Sonríe avergonzado.

_¡Coño, Churri, mira, aquí llorando como un gilipollas!

El Churri le palmea la espalda. Le mete en el bolsillo de la guerrera un puñado de carterillas de papel de fumar.

_Benito, yo no te he traido tabaco _se excusa Castro_. Con las prisas...

_¡Qué más da!

_No sabes la alegría que me llevé ayer al saber que estabas vivo. Con esta mierda de guerra...

_Yo también me alegré por ti. Digo, mira Juanillo, al joío lo bien que le va con los mulos, que es lo suyo, aunque sean fascistas, ¡qué coño!

_¡Los mulos que van a ser fascistas! _protesta Castro riendo_. Ni rojos ni fascistas. Más conocimiento tienen que nosotros.

El Churri sonríe. Reflexiona un momento, serio, y luego dice:

_Todo este tiempo me ha escocido lo mal que quedamos, nosotros, que éramos como hermanos... más que hermanos. No sabes cómo he pensado en ti, con ganas de que acabara la guerra para encontrarte y que nos diéramos un abrazo de paz...

Castro aprieta el brazo de su amigo.

_Pues ya nos lo hemos dado, Benit.o. Yo también he pensado mucho en lo mal que lo hicimos. La culpa la tuve yo. Ya sabes: por el qué dirán... Como mi padre no quería que me significara con elementos anarquistas...

_¡Venga, hombre! La culpa fue de los dos, que yo también me puse muy burro y debí mandar a la mierda al comisario de mi sección cuando me dijo que qué era eso de tener un amigo fascista...

_Venga, Benito: eso ya es agua pasada. ¿Todavía te gusta el chocolate?

_¡Coño, Juanillo, eso no se pregunta!

Saca Castro media tableta de chocolate y la comparte con su amigo. (págs. 110-111)

domingo, 2 de marzo de 2008

Amado Nervo - No sé quién es...

¿Quién es? -No sé: a veces cruza
por mi senda, como el hada
del ensueño: siempre sola...
siempre muda... siempre pálida...
¿Su nombre? No lo conozco.
¿De dónde viene? ¿Do marcha?
¡Lo ignoro! Nos encontramos,
me mira un momento y pasa:
¡Siempre sola...! ¡Siempre triste...!
¡Siempre muda...! ¡Siempre pálida!

Mujer: ha mucho que llevo
tu imagen dentro del alma.
Si las sombras que te cercan,
si los misterios que guardas
deben ser impenetrables
para todos, ¡calla, calla!

¡Yo sólo demando amores:
yo no te pregunto nada!

¿Buscas reposo y olvido?
Yo también. El mundo cansa.
Partiremos lejos, lejos
de la gente, a tierra extraña;
y cual las aves que anidan
en las torres solitarias,
confiaremos a la sombra
nuestro amor y nuestras ansias...

sábado, 1 de marzo de 2008

Majipur

- Hoy he tomado un café con M.
- ¿Sí? ¿Y qué cuenta?
- Que su hijo se ha ido de viaje de novios un mes a la India.
- No me iría de viaje de novios a la India. Bueno, en todo caso me iría a Majipur.
- ¿Majipur?
- Sí, hombre. La zona de la selva. Ya sabes, dónde estaba Sandokán.
- Pero Sandokán no estaba en Malasia. Acuérdate: El Tigre de Malasia.
- Bueno, sí. Me refería a Malasia. Famosa por la peli de Zoolander (sonrío).
- ¿Zoolander? ¡Ah, si! (Ja! Ja!)¿Pero Malasia está en la India? ¿Tú estas segura de que Majipur está en la India?
- Bueno hombre, ahora lo miro.

Google de mis amores allá voy. Tecleo la palabra mágica: Majipur. Me pongo de color purpurina.
Luego me echo a reir. Se lo enseño.

- ¿Con que tú te irías de viaje de novios a Majipur? (Ja! Ja!)
- (Ja! Ja!) Bueno, dejemoslo en que me iría a la selva de Sandokan.
- Sí, y encontrarte con un Tigre de Bengala.
- Claro, con Richard Parker si puede ser.
-¿Richard Parker?
-Sí, uno de los protagonistas de La Vida de Pi.

Razono, ¿por qué habré pensado que Majipur está en Malasía? Miro la información y me encuentro con Las Torres Petronas . ¡Estan en Kuala Lumpur!. ¡Claro! ¡Ahí lo tienes! Lumpur=Majipur.

Y es que a estas alturas de mi vida, haber disfrutado con las andanzas de Lord Valentine en Majipur, es comparable con las hazañas protagonizadas por Sandokán o las tribulaciones de Richard Parker. Y es que a la hora de imaginar... ficción se mezcla con realidad.